La Gran Montaña

El Teide fue considerado anteriormente como la montaña más alta del mundo. Después de continuos descubrimientos esta definición se ha denegado. Aún así, la altura de 3718 m sobre el mar sigue impresionando a los turistas y los propios habitantes de Tenerife. Por si alguna duda queda existente, voy a hablar sobre los encantos de nuestro volcán incluyendo, además de sus paisajes, su flora.





Para llegar al Teide puedes escoger diferentes caminos. En mi opinión, el camino que circula por la autopista del norte, recorriendo gran parte de los municipios norteños, ofrece más juego, en cuanto a paisajes e historia. De esta manera se podrán realizar diversas paradas para admirar los paisajes del norte de la isla. En primer lugar, el Mirador Humboldt ofrece unas vistas diversas: mirando hacia el norte divisamos el Puerto de la Cruz, uno de los principales núcleos turísticos de Tenerife; al sur, las Cañadas del Teide; al este, Santa Úrsula y al oeste, Tigaiga.

Al ascender, podemos parar en el mirador “Piedra la Rosa” (foto de la derecha). Desde ahí vemos ya con más claridad el Teide y su entorno. Este mirador tiene su atractivo en el nombre, pues es real, hay una piedra con la forma detallada de una rosa.

Nos acercamos cada vez más al Teide y paramos en el Centro de Visitantes. Allí conoceremos muchas especies endémicas, tales como el “Alhelí del Teide” (foto de la izquierda) o el “Rosal del Guanche”. Después nos acercamos a las Minas San José. Es un paisaje como sacado de una película de extraterrestres. Un paisaje poco común y atrayente.

Estando ya a 5 pasos del Teide, se nos ofrece la oportunidad de subir a él: en un teleférico o bien, para los amantes del senderismo, caminando. Es una oportunidad única, el poder estar a tantos metros de altura y divisar gran parte de la isla de Tenerife.

Por último, y no menos importante, descubrimos los Roques de García. Una estampa perfecta, justo con el Teide detrás. Al lado de los Roques se encuentra La Catedral, una chimenea volcánica que sobresale del paisaje.

El Teide, sin duda, es una obra admirable de la Naturaleza. No obstante, el continuo desgaste al que se somete debido a las miles de visitas al día, puede provocar que nuestra obra se vea deteriorada.

Animo a todo el mundo para que lo visite y que no se pierda este paisaje único de nuestra isla, eso sí, respetándolo, ya que es parte de nosotros.

Para más información, no dude en visitar estas webs:
http://reddeparquesnacionales.mma.es/parques/teide/index.htm http://www.webtenerife.com/PortalTenerife/Home (Web oficial de Turismo de Tenerife)

En la foto: Mis compañeros y yo en una visita al Teide. Detrás de nosotros, el Teide y los Roques de García.